Show Notes
Podemos deleitar al Señor con las fragancias de ser una bendición para los demás. ¡Esto nos motiva a obrar cada día de manera que nuestros actos sean como una agradable fragancia que llega la presencia del Padre!
En este mundo tan lleno de maldad, envuelto en la inmundicia del pecado que tu vida refleje la gracias y el amor de Dios, Sé una bendición. ¡Es una obra fragante!